¿qué elementos debe tener una evaluación inclusiva?
Los principales elementos de la educación inclusiva son
Todos los niños y jóvenes tienen derecho a acceder a una educación que responda a sus necesidades. La educación inclusiva es un concepto que se ha desarrollado a partir de este derecho fundamental, pero ¿qué aspecto tiene en la práctica?
IntroducciónPara los alumnos y los profesores, las aulas y las comunidades, las investigaciones demuestran que la educación inclusiva funciona. Los pequeños cambios pueden dar lugar a transformaciones de mayor envergadura, y éstas pueden extenderse a toda la clase y el sistema escolar. Cinco expertos en la materia comparten un principio clave de lo que define una educación inclusiva.Principio 1: La diversidad en el aula enriquece y refuerza la educaciónAnna Laktionova, profesora principal y coordinadora de Year 8, Keysborough CollegeCada alumno es único y cada grupo de alumnos es diferente. La diversidad en las escuelas es un hecho. Los alumnos tienen experiencias, culturas, creencias y valores diferentes. Puede suponer un reto para los profesores, los alumnos y sus padres. También crea oportunidades de crecimiento y mejor conexión en los logros personales, sociales y académicos.Dos cuestiones centrales que hay que plantearse son:Los educadores inclusivos son los que se basan en los conocimientos y experiencias de sus alumnos. Cuestionan sus propias creencias sobre el aprendizaje de los alumnos. Son flexibles y están preparados para un reto. Y, sobre todo, aceptan la diversidad en sus aulas.
Elementos de la educación inclusiva pdf
Esta breve revisión de la literatura relevante sobre la educación inclusiva forma parte del proyecto más amplio Comunidades Escolares Inclusivas: Informe de evaluación final entregado por el equipo de Investigación en Educación Inclusiva y Especializada (RISE) a JFA Purple Orange en octubre de 2020.
Jarvis, J. M., McMillan, J. M., Bissaker, K., Carson, K. L., Davidson, J., & Walker, P. M. (2020). Proyecto de comunidades escolares inclusivas: Final Evaluation Report. Research in Inclusive and Specialised Education (RISE), Flinders University.
A pesar de la legislación y los imperativos políticos relacionados con la educación inclusiva, sigue habiendo una falta de consenso en el campo sobre la definición de la inclusión y los modelos asociados de la práctica inclusiva (Ainscow & Sandill, 2010; Kinsella, 2020). Las múltiples conceptualizaciones de la inclusión y los enfoques teóricos para fomentar la inclusión en las escuelas pueden contribuir a la confusión y la incertidumbre de los educadores y los responsables políticos. Dado que las escuelas se enfrentan a una responsabilidad cada vez mayor y que se espera que los profesores eduquen a una población estudiantil cada vez más diversa (Anderson y Boyle, 2015), es vital que el concepto de educación inclusiva se desmitifique para los profesionales. En este contexto, las iniciativas como el proyecto Comunidades Escolares Inclusivas (CSI), que tienen como objetivo profundizar en la comprensión de la inclusión y aumentar la capacidad de las comunidades escolares para proporcionar una educación inclusiva, son particularmente importantes.
La evaluación inclusiva en la enseñanza superior
Cuanto más leo en el campo de la educación y cuanto más tiempo trabajo con los profesores, visito las aulas e investigo las mejores prácticas actualizadas, más veo la integración entre la mente, el cuerpo y el corazón. En otras palabras, cuanto más aprendo sobre la ciencia del cerebro, la atención plena, el aprendizaje socio-emocional, el pensamiento de diseño y la enseñanza culturalmente receptiva, y cuanto más presencio las interacciones diarias de profesores y alumnos, más veo que los mejores entornos de enseñanza y aprendizaje son los que incluyen todo lo anterior. El aprendizaje no es sólo un esfuerzo intelectual; es un esfuerzo humano. Y hay que planificarlo intencionadamente.
Durante las vacaciones de invierno estuve releyendo a algunos de mis teóricos y educadores favoritos mientras me preparaba para un taller sobre estrategias y hábitos para un aula inclusiva. Y en el proceso, me preguntaba cómo destilar este trabajo en algún tipo de marco, una lista de criterios que luego podría utilizarse como una rúbrica para un aula inclusiva. También sé que el cerebro retiene mejor la información cuando está en forma de acrónimo, algún tipo de enfoque de tamaño de un bocado. Y aunque la creación de un aula inclusiva suele ser un proceso no lineal, me decanté por un marco que llamo FAIR² (que significa retroalimentación, evaluación, admisión, relación y reflexión). En la práctica, esto significa lo siguiente:
Ejemplos de evaluación inclusiva
La evaluación inclusiva es algo más que evaluar a los estudiantes. Son las actividades continuas que permiten a los estudiantes y a los instructores comprender el progreso de los estudiantes en el cumplimiento de los objetivos de aprendizaje del curso. Se debe pedir a los estudiantes que demuestren su aprendizaje mediante evaluaciones formativas y sumativas
Lea este cuadro. En la segunda columna se incluyen algunas de las cosas que la mayoría de nosotros hacemos. A medida que vaya leyendo, marque las que ya hace. En la cuarta columna hay ideas para mejorar lo que ya hace utilizando un lenguaje más inclusivo y centrado en el alumno, así como algunas ideas nuevas que podría probar. Cuando leas la lista, marca las que quieras adoptar o adaptar.